El reconocimiento del impuesto diferido no es un asunto optativo. La norma internacional lo exige, porque su omisión puede afectar la fiabilidad de la información financiera y su utilidad para la toma de decisiones.
¿Qué es el impuesto diferido?.
Lo primero que debemos comprender, es lo que significa el impuesto diferido. Leemos la definición del estándar internacional en el párrafo 5 de la NIIF 12 así:
Pasivos por impuestos diferidos son las cantidades de impuestos sobre las ganancias a pagar en periodos futuros, relacionadas con las diferencias temporarias imponibles.
Activos por impuestos diferidos son las cantidades de impuestos sobre las ganancias a recuperar en periodos futuros, relacionadas con:
(a) diferencias temporarias deducibles;
(b) la compensación de pérdidas obtenidas en periodos anteriores que todavía no hayan sido objeto de deducción fiscal; y
(c) la compensación de créditos no utilizados procedentes de periodos anteriores.
En otras palabras, el impuesto diferido es el impuesto a pagar o a deducir en el futuro y que surge por las divergencias que existen entre las normas fiscales y las financieras.
¿Qué podría pasar si no se reconoce el impuesto diferido?
Suponga ud que en cierta jurisdicción los ingresos por valorización no son gravados sino hasta cuando se convierten en ingreso realizo a través de la venta. Operando allí, la entidad reconoce una valorización de 100 millones, derivada de una propiedad de inversión. La tasa de impuesto es del 20%; sin embargo, las leyes fiscales no gravan una valorización, sino hasta que se realice a través de la venta del activo.
La entidad aplicando las NIIF, debe reconocer un ingreso por la valorización. Así lo leemos en la norma:
Las pérdidas o ganancias derivadas de un cambio en el valor razonable de las propiedades de inversión se incluirán en el resultado del periodo en que surjan. (Párrafo 35 NIC 40)
Según lo estipulado, la entidad debería reconocer la valorización afectando su estado de resultados, pero también debería reconocer el impuesto que tendrá que pagar en el futuro, cuando la valorización se convierta en ingreso gravado según lo estipulado en el párrafo 15 de la NIC12.
Si la entidad solo reconoce la valorización, el resultado del ejercicio se afecta en 100 millones. Si la empresa reconoce también el impuesto diferido, el resultado se afecta en 80 millones de pesos (100 ingreso – 20 impuesto diferido).
Objetivo de las NIIF
El objetivo de las NIIF, es regular la preparación y presentación de información, de tal forma que los estados financieros de una entidad, sean útiles para la toma de decisiones. Si una empresa no reconoce el impuesto diferido, puede sesgar la información e inducir a los usuarios a tomar decisiones erradas a partir de ellos; por ejemplo, la definición de presupuestos, decisiones de inversión, o la distribución de dividendos entre otros.